lunes, 11 de enero de 2016

Grandes desconocidos: Da Cortona

En esta primera entrada después de las fiestas me parece acertado presentar al gran público una Natividad. Pero no es una cualquiera. Hablo de "La Natividad", de Pietro da Cortona.

Esta pintura, fechada hacia 1658, fue un regalo para Felipe IV que le hizo el cardenal Francesco Barberini, sobrino del pontífice Urbano VIII (gran amigo y protector de personalidades como Galileo Galilei o Gianlorenzo Bernini). Tras la muerte del papa, que era conocido por sus tendencias anti-españolas, sube al trono de Pedro el filo-español Inocencio X. Gracias a esto, Felipe IV ordena la confiscación de las rentas eclesiásticas de las que Barberini gozaba en España e Italia. La reconciliación entre ambos se produjo en 1659, en parte como consecuencia de los regalos que el cardenal envió a Madrid. Entre ellos se encontraba esta pintura, cuyo soporte está formado por cuarenta y tres pequeñas placas de venturina y tres de pizarra.

La venturina, denominada así porque su producción dependía principalmente de la suerte o ventura, es una pasta de vidrio que imita los efectos de la piedra procedente de la India y Rusia a la que da nombre. Se comenzó a elaborar a principios del siglo VII en la ciudad veneciana de Murano, añadiendo óxido de cobre a la pasta de vidrio transparente. Así se conseguían característicos vidrios de intensidad variable, que Pietro da Cortona (1597-1669) aprovechó para evocar el cielo estrellado. El Museo Nacional del Prado no incluye esta pieza en su catálogo de obras maestras (cosa comprensible, ya que hay muchas otras que la superan en muchos aspectos), pero es una obra admirable y que da a conocer el significado de la belleza nada más se contempla. Tanto es así que, hasta el año 2009, "La Natividad" de Da Cortona estuvo en las salas del Tesoro del Delfín. 

jueves, 24 de diciembre de 2015

¿Feliz? Navidad

Antes que nada desear a los lectores unas, si no felices, al menos agradables fiestas. La entrada de hoy está estrechamente relacionada con estos días de Navidad. Y aunque me salga un poco de la temática del Museo del Prado, me va a permitir el lector tomarme esta pequeña licencia. En esta entrada vamos a hablar de dos temas. Empecemos por el origen de la Navidad.

El cristianismo, como cualquier otra religión, no tiene nada de original. Por ejemplo, los famosos halos de santidad que aparecen en las representaciones de los santos fueron tomados prestados de la religión egipcia, que adoraba al sol: los halos de santidad son en realidad discos solares. Ahora bien, ¿qué se celebra el veinticinco de diciembre? Todos dirán que Navidad, la natividad, el nacimiento de Jesucristo. Pero, según la propia Biblia, Jesús nació en marzo. ¿Qué hacemos celebrando su nacimiento a finales de diciembre? El veinticinco de diciembre, lector, es la antigua fiesta pagana del Sol Invictus, el Sol Invencible, que coincide con el solsticio de invierno. Esa época maravillosa en la que el sol regresa y los días comienzan a alargarse. Con el fin de conquistar religiones, a menudo se adaptan festividades existentes para que la conversión sea menos traumática. Se llama "transmutación religiosa". Ayuda a la gente a acostumbrarse a la nueva fe. Los creyentes mantienen las mismas fechas sagradas, rezan en los mismos lugares sagrados, utilizan una simbología similar... y se limitan a sustituir a un dios por otro. En este caso, la fiesta del veinticinco de diciembre del Sol Invictus (a quien se identificaba en la antigua Roma con los dioses Mitra, El Gabal o Helios) se transmutó en la fiesta de celebración del nacimiento de Jesús, en sustitución del dios Sol / Helios, declarada única divinidad oficial del Imperio durante el gobierno de Juliano el Apóstata. De esta manera, 300 años después de la vida, muerte y "resurrección" de Jesús, el emperador Constantino aceptaba la celebración de la fiesta de la Navidad en honor de Jesucristo, fiesta que aparece por primera vez en un calendario romano en el siglo V d.C.

  

El Dios Sol, identificado como Mitra, como Sol Invictus
Debajo de él, su sucesor divino Jesucristo


El segundo y último tema de esta entrada está dedicado a un personaje que a algunos lectores les puede resultar recientemente familiar. Se trata de la figura de Krampus. El 8 de diciembre de 2015 se estrenó en España la película Krampus. Maldita Navidad en la que se rescata del olvido a este personaje. Pero, ¿quién es realmente Krampus?

Krampus es un personaje del folklore de los países alpinos. Según la leyenda, esta criatura (representada iconográficamente con apariencia demoníaca) castiga a los niños malos en temporada de Navidad, en contraste de San Nicolás (Santa Claus / Papá Noel) quien premia a los niños buenos con regalos. Se dice que Krampus aparece para dar tremendas palizas con una rama de abeto a los niños malos, mientras que a los niños especialmente traviesos los mete en un enorme saco que carga siempre a su espalda y se los lleva para no devolverlos jamás. Leyendas posteriores afirman que estos niños son llevados al Infierno por toda la eternidad o devorados por el propio Krampus. En la película Krampus. Maldita Navidad se le presenta como un espíritu maligno más antiguo que Santa Claus, e incluso como su sombra. Lo cierto es que la leyenda alpina original dice que aparece el 5 de diciembre merodeando por las calles en lo que se conoce como Krampusnacht, ya sea solo o junto a San Nicolás, haciendo sonar cadenas oxidadas y campanas para asustar a los niños y recordar a los malos que en veinte días Krampus irá a por ellos. San Nicolás y Krampus son las dos caras de la misma moneda. Y en la actualidad es frecuente (sobre todo en Alemania) el enviar postales de felicitación a los familiares con ilustraciones y la frase que os deseo y comparto con vosotros: ¡Felices fiestas de parte de Krampus!

sábado, 14 de noviembre de 2015

Entre Reyes y Odaliscas: un acercamiento a Ingres

El día 24 de Noviembre abrirá sus puertas al público la exposición del Museo del Prado sobre Jean-Auguste-Dominique Ingres, más conocido simplemente como Ingres. Como lo prometido es deuda, en la entrada de este fin de semana hablamos un poco sobre la vida y milagros de este pintor francés del siglo XIX.

Ingres, Self-portrait.jpg
"Autorretrato", a los 24 años

Ingres no es, en sentido estricto, ni neoclásico ni académico; sino un firme defensor del dibujo. Resulta al mismo tiempo clásico, romántico y realista. Si el siglo XIX se caracteriza por algo en el terreno social, es por el nacimiento del romanticismo. E Ingres es un romántico de manual en cuanto a los temas y colores que gusta representar. Algunas de sus obras se enmarcan en el llamado "Estilo trovador", inspirándose en el ideal griego y gótico además de en las miniaturas de los Libros de Horas de Fouquet. Vemos, pues, que Ingres es romántico en el sentido de erudito, conocer de distintas ramas del saber humano respecto a las Humanidades. Se interesa por la arqueología, la cultura clásica, el mundo oriental (los tiempos pasados) así como con ciencias y artes del medievo y Renacimiento. Los románticos del siglo XIX temen que todo el misterio y magnificencia de la Humanidad haya quedado en manos de la diosa Razón, tan ardientemente defendida en el siglo anterior, el Siglo de las Luces, la Ilustración. De esta manera Ingres también se siente atraído por lo exótico, siendo conocido especialmente por el orientalismo que desprenden sus desnudos femeninos: las odaliscas.

"La gran Odalisca", conservada en el Museo del Louvre (París)

Tenemos la inmensa suerte de que el Museo parisino ha accedido a prestarnos este cuadro, probablemente el más conocido del pintor, de manera que podremos verlo expuesto en las salas del Prado desde el 24 de Noviembre. 

No quiero abrumar al lector con datos biográficos en exceso de Ingres. Baste decir que su padre, Jean Marie Joseph Ingres, un escultor mediocre; supo ver en seguida en su hijo el talento pictórico que poseía y rápidamente favoreció sus aspiraciones artísticas. Ingres se formó en Toulouse (1791), París (1796) y Roma (1806), donde descubrió a Rafael y el Quattrocento italiano que marcarían definitivamente su estilo. Ahí es donde desarrollará la mayor parte de su producción. Está en el cenit de su arte, y sin embargo sus cuadros no son bien acogidos en Francia debido a que el gusto de los franceses en esa época era muy diferente al que practicaba Ingres. Sus obras reciben duras críticas en Francia, por lo que el pintor decidió quedarse en Roma. 

La posterior caída de Napoleón y las dificultades económicas y familiares (Ingres se había casado en 1813 con Madelaine Chapelle) significan para el pintor un período bastante mísero en el que pinta con desgana todo lo que le encargan. También trabajó durante un tiempo en Florencia hasta que, en 1841, debido al éxito que tuvo en Francia un cuadro suyo encargado por un cardenal francés; le abre las puertas de París. En la capital gala es acogido como un héroe y le encargan ni más ni menos que la decoración de las vidrieras de la catedral de Nôtre Dame. Cinco años después expone en la Galería de Bellas Artes por primera vez, donde es nombrado Miembro de Honor de la Comisión junto con Delacroix. Pero en 1849 presenta su dimisón con motivo de la muerte de su esposa.

En el último periodo, debido a una enfermedad que le afectó a los ojos, Ingres se vio obligado a valerse de algunos de sus colaboradores para ultimar la parte secundaria de muchas de sus obras, en las que buscaba una perfección absoluta de las formas. Ingres se casó por segunda vez, con Delphine Ramel, y fue nombrado Senador. Fue en esta época cuando se dedicó casi exclusivamente a realizar una galería de retratos, que constituye un testimonio muy valiosa de la sociedad burguesa de su tiempo, del espíritu y las costumbres de una clase social a la que él pertenecía y que sabía dónde estaban sus virtudes y sus límites. Ingres murió a los 87 años, y está enterrado en el Cementerio de Père Lachaise, en París. La ciudad de Montauban le dedicó un museo instalado en el que fue su taller. 

Aún no sé qué obras podremos admirar en la exposición de Ingres en el Prado, así que dejo aquí algunas de las más representativas para que vayáis abriendo boca:

"El Baño Turco"

"Napoleón en su trono imperial"

"Louise de Broglie, condesa de Haussonville"

"Júpiter y Tetis"

"Edipo y la Esfinge"

"Odalisca con esclava"

Por supuesto, y como en todas las Exposiciones Temporales, también aquí BIANOR TOURS hará visitas guiadas por la exposición dedicada a uno de los mejores pintores franceses del siglo XIX. ¿Te lo vas a perder?

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domingo, 8 de noviembre de 2015

Feliz cumpleaños, Museo del Louvre

Un 8 de Noviembre de 1793 el Museo del Louvre abría sus puertas al público en París.Se convertía de esta manera en el museo más antiguo de Europa, consagrado al arte anterior al impresionismo, tanto bellas artes como arqueología y artes decorativas. Ubicado en el antiguo Palacio Real del Louvre, es uno de los museos más importantes del mundo y en BIANOR TOURS queremos hacerle un pequeño homenaje en la celebración de sus 222 años de historia.



Actualmente promueve dos subsedes, en Lens (Francia) y en Abu Dabi (Emiratos Árabes). Sus extensas colecciones son el resultado de un doble esfuerzo histórico. Al coleccionismo desarrollado por la monarquía francesa a lo largo de los siglos hay que sumarle el esfuerzo de los hombres de la Ilustración, la labor desamortizadora de la Revolución Francesa y las campañas arqueológicas y compras impulsadas durante todo el siglo XIX. La apertura del Louvre en 1793 significó, dentro de la historia de los museos, el traspaso de las colecciones privadas de las clases dirigentes (monarquía, aristocracia e Iglesia) a galerías de propiedad pública para el disfrute conjunto de la sociedad. Por ello el Louvre constituyó el precedente de todos los grandes museos nacionales europeos y norteamericanos, y de hecho fue el modelo para muchos de ellos, como nuestro querido Museo del Prado, que fue el segundo del mundo que abrió sus puertas al público. Actualmente el Museo del Louvre es el más visitado del mundo, muy famoso por sus obras maestras, siendo especialmente famosa "La Gioconda" de Leonardo Da Vinci.

  

En sus colecciones podemos encontrar antigüedades orientales, egipcias, griegas, etruscas, romanas, artes del Islam, esculturas, objetos de arte, pinturas y artes gráficas. En total suman 35.000 obras en exposición, pero los fondos del museo ascienden a 445.000 obras. Como curiosidad, decir que las salas dedicadas al arte islámico cuentan con el patrocinio y la manutención económica de países y magnates islámicos, deseosos de favorecer la difusión de su cultura en Europa. Gracias a atractivo de sus ricas colecciones y al turismo que fluye anualmente a París, el Louvre se mantiene entre los museos más visitados del mundo; a lo largo de un año recibe de media 8,5 millones de visitas frente a la media de 3 millones del Prado. Las colecciones del Louvre tienen diversos orígenes, de la misma manera que el Prado:

 - Las colecciones reales. Los monarcas franceses mostraron, ya desde el siglo XIV, afición por adquirir obras de arte debiendo destacarse la labor de Francisco I, quien protegió a Leonardo Da Vinci en su palacio en sus últimos años. Con todo, la colección real era relativamente pequeña hasta que Luis XIV adquirió las colecciones del banquero Jabach y del cardenal Mazarino. Luis XV adquirió la colección del príncipe de Carignan y Luis XVI, cuadros de las escuelas flamenca y holandesa. Antes de que le cortasen la cabeza, lógicamente.

- La Revolución Francesa significó la obtención de obras de arte para el Estado por diversos caminos: la supresión de las órdenes monásticas, la desafectación de las Iglesias y el abandono de bienes por la nobleza huida. También, entre 1794 y 1795 llegaron obras requisadas por el ejército revolucionario de Bélgica y Holanda.

-Las guerras napoleónicas significaron un notable crecimiento de las colecciones del Louvre, rebautizado como Museo Napoleón, pues los ejércitos requisaron obras en varios países invadidos (como España). Muchas de estas obras tuvieron que devolverse al caer el régimen napoleónico, pero algunas muy importantes quedaron en el Louvre como "Las bodas de Caná" de Veronés. En 1801 la firma del Concordato obligó al Louvre a devolver a las iglesias el arte religioso.

-Durante los siglos XIX y XX, la colección se incrementó mediante donaciones de coleccionistas privados, así como por una política de adquisiciones que se ha centrado sobre todo en la escuela francesa, que estaba representada de manera incompleta de acuerdo al gusto de los sucesivos reyes. Muchas obras medievales, del rococó y del romanticismo llegaron poco antes de 1900. El fondo de pintura medieval italiana creció sustancialmente gracias a que Napoleón III compró la Colección Campana, propiedad del financiero italiano del mismo apellido. Parte de ella se encuentra en el Petit Palais de Aviñón. Entre las donaciones, cabe destacar dos legados: el del difunto coleccionista Louis La Caze, que aportó en 1869 la "Betsabé" de Rembrandt y "El patizambo" de José de Ribera; y en 1935 el legado del barón Edmond de Rothschild (1845-1934), con más de 40.000 grabados, casi 3.000 dibujos y 500 libros ilustrados. En fecha reciente, el diseñador Yves Saint Laurent legó un importante retrato de Goya al Louvre.

De acuerdo a una ordenación cronológica de las colecciones nacionales, el Louvre muestra obras de arte anteriores a 1848. Casi todas las obras del siglo XIX avanzado, desde el realismo (Courbet) hasta el impresionismo y Toulouse-Lautrec fueron transferidas al Museo d'Orsay, y el arte moderno y contemporáneo se exhibe en el Centro Pompidou.


Obras destacadas       

"Autorretrato", de Alberto Durero (1493)

"La Virgen, el Niño y santa Ana"
de Leonardo da Vinci

"Las bodas de Caná", de Veronés

"Betsabé en el baño", de Rembrandt

"Victoria alada de Samotracia"

"Eros & Psique", de Antonio Canova

"Et in Arcadia Ego", de Nicolas Poussin

"La Libertad guiando al pueblo", de Eugène Delacroix

Queda así reflejado nuestras felicitaciones al Museo del Louvre en su 222º cumpleaños. Pero esta entrada no es sólo para conmemorar tanta historia ni tanto arte. También es para recordar a los lectores que el próximo 19 de Noviembre nuestro Museo del Prado también estará de cumpleaños. En el Aniversario del Prado de este año nuestro museo cumplirá 196 años, desde aquel lejano 1819 que abrió sus puertas al público por primera vez. Así que si el lector no suele ir al museo porque considera que es muy caro, está de enhorabuena: el acceso a la Colección del museo será gratuita durante todo el día. ¿A qué espera?

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domingo, 25 de octubre de 2015

El divino Morales & el horóscopo de Cristo


Hasta el 10 de enero se podrá disfrutar en el Museo del Prado de una excepcional selección de obras del artista del Renacimiento español Luis de Morales llamado "el divino" porque, según Antonio Palomino, todo lo que pintó fueron cosas sagradas.


Pero hay un cuadro que llama poderosamente la atención entre sus representaciones de vírgenes y santos. En 1563, Morales realizó el encargo de una pintura que, a simple vista, parece una representación convencional de la Sagrada Familia. Sin embargo el lienzo, procedente de la Hispanic Society de Nueva York, esconde un singular y cautivador detalle.

  
"La Sagrada Familia", de Luis de Morales

En primer término aparece representada la Virgen María con el niño Jesús dormido entre sus brazos. A su izquierda (desde el punto de vista del espectador) se encuentra san José y, a la derecha, una joven que sostiene una cesta con varios huevos que mira al espectador. En el fondo, Morales pintó un paisaje donde se aprecia una torre con la inscripción latina Turris Ader (Torre de Ader) que según los Evangelios es el lugar donde los pastores recibieron el anuncio de que Jesús había nacido. Por eso aparece iluminada con una potente luz celestial junto con un rebaño de ganado. La escena completa parece estar, por tanto, recordando el nacimiento de Jesús. Sin embargo un último elemento, en la esquina superior derecha, sobresale por sus extrañas características: se trata de una figura cuadrangular repleta de símbolos y líneas aparentemente incomprensibles, acompañada por una larga frase en latín. Esta curiosa figura no pasa desapercibida a la mayoría de los espectadores que se fijen mínimamente en la pintura, ya que se trata, ni más ni menos, de una carta astral. La pregunta es, ¿qué hace representada en una pintura religiosa?

Detalle del horóscopo de Cristo 

Aunque la presencia del insólito horóscopo ha llamado la atención de no pocos estudiosos, ha sido el historiador de arte español Juan Francisco Esteban Lorente quien más a fondo ha analizado el origen y el significado del mismo. En el año 1554, apenas nueve años antes de la creación que se adjudica a la pintura, el científico y matemático italiano Gerolamo Cardano había publicado un libro comentando el Quadripartitus de Ptolomeo y en él aparece, precisamente, un horóscopo idéntico al presentado en el lienzo de Morales. Dicho horóscopo es, como indica Esteban Lorente y por extraño que parezca, la carta astral de Cristo.

En su libro, Cardano había tomado como referencia la fecha tradicional del nacimiento de Cristo (las 0 horas del 25 de Diciembre del año 0), y con ella creó el horóscopo correspondiente. La identificación del cuadro astrológico representado en la pintura con el trazado por el matemático italiano queda fuera de toda duda por otro elemento, la inscripción en latín que aparece en el cuadro, y que resulta sospechosamente similar a la recogida en el libro de Cardano:

<< Ésta es la situación de los cielos bajo la que Cristo Jesús 
apareció en el mundo hecho hombre, en el día seis y doce
horas antes del principio del año astrológico, que es el inicio
astral del año eclesiástico. En la latitud de 32 grados norte. >>

 
Comparación del detalle de la pintura y el horóscopo diseñado por Cardano

Curiosamente, todo parece indicar -aunque no hay pruebas definitivas- que la pintura realizada por Morales había sido un encargo de Juan de Ribera, obispo de Badajoz y más tarde arzobispo de Valencia, cuya afición por las cuestiones astrológicas era más que notable, a juzgar por la nutrida colección de títulos sobre la cuestión formaban su biblioteca. El encargo del obispo Ribera habría tenido lugar en torno a 1562, cuando la Iglesia de Roma todavía no había dictado prohibiciones específicas sobre ciertas prácticas astrológicas -en especial sobre horóscopos relacionados por Cristo- y, por lo tanto, la representación astrológica de la naturaleza humana de Jesús aún no se veía como sospechosa de herejía. De haberse producido tan sólo unos años más tarde, es posible que la pintura nunca se hubiese realizado. 

Quien sí sufrió la condena eclesiástica fue Cardano pues, aunque había tenido la precaución de incluir un significativo texto en su análisis del horóscopo de Cristo ("Y no pienses que yo quiero decir que la divinidad de Cristo, o sus milagros, o su santidad de vida o la promulgación de la ley dependen de los astros...") fue detenido por la Inquisición en 1570, y el fragmento de su obra relativo a esta cuestión fue suprimido por orden del papa Sixto V en 1586.  

Retrato de Gerloamo Cardano expuesto en la facultad
de Matemáticas y Estadística de la Universidad de St. Andrew

Además de recomendar la visita a la exposición El Divino Morales, en BIANOR TOURS también ofrecemos un interesante recorrido por toda la pintura del Renacimiento español. A menudo nos quedamos solamente en el arte renacentista italiano o flamenco y no nos damos cuenta de que en España también tuvimos grandes artistas en los siglos XV y XVI como Juan de Juanes, Luis de Morales o Pedro Berruguete. Así que invito al lector a que me acompañe en un recorrido por esas obras perdidas de nuestra historia. Si desea más información, no dude en contactarme.

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lunes, 28 de septiembre de 2015

Effigies Amicorum. Un vistazo a Madrazo

El pintor Carlos Luis de Ribera, 1839. Federico de Madrazo. Óleo sobre lienzo. Firmado y fechado
"El pintor Carlos Luis de Ribera", por Federico de Madrazo

Con el título Effigies Amicorum. Retratos de artistas por Federico de Madrazo (1815-1894), el Museo del Prado expone desde el 22 de Septiembre hasta el 10 de enero una más que importante muestra del mayor retratista de artistas de España. Se trata de obras de interés exponentes de su mérito y dignidad profesionales. 

Los que hizo al óleo se los regaló a los efigiados. Todos ellos eran amigos, como Carlos Luis de Ribera a quien retrató en París en una de sus primeras obras maestras. En otros retratos podemos identificar a Benito Soriano Murillo, colaborador íntimo como subdirector del Museo del Prado (ya que el propio Madrazo era el director) o a Perugino Sensi, un litógrafo que había trabajado en el Real Establecimiento Litográfico fundado por su padre. José de Madrazo. También tiene retratos de otros amigos como Carlos de Haes o Cosme Algarra, de discípulos destacados como Eduardo Rosales o de su propio hijo, Raimundo.

"El pintor Benito Soriano Murillo", por Federico de Madrazo

Estos retratos forman parte de un amplio conjunto de medidas, técnicas y estilos similares que el artista, muy consciente de su interés no sólo artístico sino también documental, conservó y posteriormente legó al Prado. Realizados en su mayoría en París, Roma y Madrid revelan el propósito (inaugurado por los artistas alemanes del siglo XVI) de formar una especie de álbum iconográfico de amigos artistas y escritores. El conjunto más importante fue el que realizó en Roma, donde coincidió con Jean-Auguste Dominique Ingres, a quien había retratado años antes y cuya influencia es notable en algunas efigies como las de Ponzano o Zanetti.

Federico de Madrazo, además de director del Museo del Prado, fue uno de los más grandes artistas del siglo XIX. Si el lector está interesado en conocer a la familia Madrazo y a sus contemporáneos no dude en solicitar una visita guiada en Bianor Tours por las salas de pintura española. Si quiere cualquier información, no dude en pedirla. Gracias.

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sábado, 8 de agosto de 2015

Adiós a Coello

Un día como hoy, de 1588, fallecía en Madrid el célebre retratista del renacimiento español Alonso Sánchez Coello. Habiendo nacido en Benifairó de los Valles (Valencia), fue nombrado pintor de cámara del rey Felipe II.

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A la izquierda, Coello en un grabado del siglo XIX. Al lado, un posible autorretrato 

Desde los diez años vivió en Portugal, comenzando su formación artística en Lisboa como protegido del rey Juan III. Después marchó a Flandes, donde estudió con Antonio Moro. En 1552 trabajó como pintor de la familia real en la capital portuguesa y en 1555 estaba de regreso en España, donde se convirtió en el retratista de la familia real y de su entorno más cercano. Entró al servicio de Felipe II en El Escorial en el año 1559.

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Retrato de la infanta Isabel Clara Eugenia, hija de Felipe II.
Museo Nacional del Prado (Madrid)

Sánchez Coello era admirador de Tiziano, como él, experto en retratos y figuras sencillas. También desarrolló un gusto por el detallismo similar al que siglos después mostraría Velázquez. Entre su obra se encuentran diversas escenas religiosas para la Iglesia y los nobles de la corte, aunque su fama se debe a los retratos sobre todo de la familia real y su entorno. Son retratos de gran sencillez en los que presenta sin artificios a los personajes, casi siempre situados ante un fondo neutro (verbi gratia, un cortinaje de color oscuro) que acentúa los colores y calidades de los ropajes. 

 
Retrato del Príncipe don Carlos.
Museo Nacional del Prado (Madrid)

Combinando el estilo de su maestro Antonio Moro con el de su admirado Tiziano, retrató en numerosas ocasiones a los hijos de Felipe II. Estos retratos servían sobre todo para reflejar el sano crecimiento de los infantes y concertar uniones matrimoniales dinásticas.

Retrato de las infantas Isabel Clara Eugenia y Catalina Micaela.
Museo Nacional del Prado (Madrid)

Sánchez Coello fue uno de los artistas más importantes del siglo XVI español puesto que trabajó para Felipe II, dueño del Imperio donde jamás se ponía el sol. En Bianor Tours he querido hacerle este pequeño homenaje en el aniversario de su muerte y aprovecho para recordar al lector que si está interesado en saber más sobre la vida y arte de Coello o sobre la dinastía de reyes para los que trabajó, ya está disponible la Ruta de los Austrias. Si desea más información no dude en ponerse en contacto con nosotros. Gracias.


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